Casi se arma la campal en el cara a cara de Tyson Fury Vs. Dillian Whyte
Tyson Fury y Dillian Whyte estuvieron frente a frente este miércoles en su última rueda de prensa previo al combate del sábado. Una ceremonia que procedía con una buena carga de respeto y cordialidad, hasta que el padre del ‘Gypsy King’ casi inicia una campal en el careo.
Los 94 mil boletos vendidos del Estadio de Wembley, garantizan en sensacional escenario para la contienda en la que se disputará el título mundial de peso completo del Consejo Mundial de Boxeo, en una pelea que tardó demasiado tiempo en llegar.
“Entrené bien, empecé a trabajar desde enero. Fue una buena preparación, hicimos todo lo mejor para llegar en las mejores condiciones, porque sabemos que Dillian hizo también todo lo mejor y sabemos que los fans disfrutarán mucho porque Dillian y yo estamos listos para el rock and roll”, dijo el peleador que hará la segunda exposición de la corona que le arrebató al estadounidense Deontay Wilder.
Para Tyson esta pelea será una forma de seguir el gran paso que comenzó desde ese empate con Wilder en el 2018, en donde consiguió peleas del año y dramáticas gracias a su trilogía.
“Significa todo para mí poder disputar este título en mi propio país y especialmente Wembley no está muy lejos de donde soy yo. Significa todo, es masivo. Nadie esperaba que Tyson y yo, especialmente yo, estuviéramos aquí y yo estoy listo. No escucharán tonterías de mí, yo estoy listo para pelear”, dijo el retador que ha esperado con paciencia 4 años.
ALTERCADO CON FURY PAPÁ
El suceso que originó el conflicto cuando John Fury se puso entre los boxeadores en el cara a cara y comenzó a decir cosas al equipo del retador. Subieron personas al estrado, pero para fortuna, los boxeadores fueron los más calmados y terminaron separando a todos.
«El padre de Tyson Fury se tiene que relajar. El viejo tiene 600 años y se pone a encarar, intentando que gente de mi equipo no subiera al estrado. Le dije: ‘John, cálmate, eres un adulto. Sigues gritando y pataleando como un niño», declaró Whyte tras el evento a BT Sport.
«Estaba intentando iniciar un pleito. Es un estúpido porque es una gran pelea. Estuvo a punto de costarle a 90,000 personas. John Fury es un verdadero idiota».
«Evité que se armara en el escenario. La gente quiere una gran pelea, quiere golpes y gritos, pero dejen que los boxeadores lo hagan, no que se sumen los equipos», declaró Tyson Fury. «Estamos aquí para pelear. La gente quiere ver una verdadera pelea, no gritos y sombrerazos».
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